Kinesiología

“Si alguien desea una buena salud, primero debe preguntarse si está listo para eliminar las razones de su enfermedad. Sólo entonces es posible ayudarlo”

Hipócrates

¿Qué es la Kinesiología?

Es una técnica que combina el test muscular con los principios de la Medicina Tradicional China, con la equilibración de la energía, la nutrición y con otras modalidades de sanación.
La kinesiología entiende al ser humano como un todo, por lo tanto es holística y tiene en cuenta la interrelación que existe entre los distintos sistemas corporales. Cada músculo se relaciona con un órgano, con un meridiano de acupuntura, con unas emociones, con unos nutrientes… es decir, en Kinesiología tratamos a nivel fisiológico, nutricional, emocional y energético.
Mediante el test muscular identificamos la naturaleza de los bloqueos (estrés, dolor, falta de nutrientes, toxicidad, alteraciones emocionales, dificultades en el aprendizaje, disfunciones en el comportamiento, etc.) y corregimos mediante las equilibraciones correspondientes.
Buscamos la manera idónea de facilitar un cambio que permita la regulación del organismo. En realidad, liberamos el estrés para que el propio cuerpo se autorregule y encuentre la forma de sanar.


¿A qué nos referimos cuando hablamos de estrés?

El estrés es una respuesta natural y necesaria para la supervivencia. Cuando esta respuesta natural se da en exceso se produce una sobrecarga de tensión que se ve reflejada en el organismo con la aparición de enfermedades. Esta presión puede ser debida a tóxicos, a conflictos, a exceso de actividad, etc. Y esto provoca que el sistema comience a consumir mucha más energía de la que necesitamos hasta llegar al agotamiento.
Todos los bloqueos que tenemos se somatizan en el cuerpo, y éste revela con gran precisión la localización y la naturaleza de sus desequilibrios. A veces se encuentran en los propios músculos o en las articulaciones, y otras veces en el campo energético más sutil como los meridianos o chakras.
Lo que hacemos en Kinesiología es recuperar la energía liberando parte de ese estrés que está acomodado en la memoria somática, disolviendo así el conflicto y recuperando la capacidad de elección que tiene la persona, para escoger lo que quiere en la vida.


¿Cómo funciona la Kinesiología?

La Kinesiología se basa en el modelo del Triángulo de la salud, en el que se compara al ser humano como un triángulo equilátero, en el cual cada parte: emocional o psicológica, nutricional o bioquímica y estructural o física, tiene que estar en equilibrio y armonía con las demás.

Un ejemplo para entenderlo sería el de una persona que vive bajo mucho estrés: tiene problemas financieros o de pareja, cuando los síntomas empiezan a aparecer es señal de que existe un desequilibrio. Como el aspecto emocional del triángulo se distorsiona, también el aspecto bioquímico se distorsiona (a través de los sistemas nervioso y endocrino) que se extiende al aspecto psicológico aún más (derivando en ansiedad, depresión o ira) y a su vez tiene un impacto negativo en la estructura (la tensión o espasmos en los músculos esqueléticos, o los músculos lisos de los órganos internos) resultando así en una enfermedad física con dolores, problemas posturales o digestivos ya que el funcionamiento de los órganos internos también se ve afectado.
No importa cuales sean los síntomas que la persona esté experimentando, la kinesiología lleva el equilibrio al cuerpo y lo coloca en un estado óptimo para sanarse a sí mismo; y esto lo consigue eliminando todo el estrés perjudicial, tanto físico, químico como afectivo.
La lista de problemas de salud que se pueden solucionar o mitigar es prácticamente interminable. Cualesquiera que sean los síntomas que se manifiesten, las correcciones kinesiológicas estimulan al conjunto cuerpo/mente a sanarse a sí mismo.

Es asimismo ideal para una atención sanitaria de carácter preventivo, ya que el fin último de la kinesiología es crear un estado de salud y armonía mediante la puesta en equilibrio de todos los aspectos de la persona.