¿Qué es la Terapia Individual?

“Lo importante es no dejar de hacerse preguntas”

Albert Einstein

Después de mis años de experiencia y todas las disciplinas que he aprendido, las sesiones que ofrezco no se limitan a una sola técnica pues considero que la combinación de varias suele ser más efectivo.

La visión que tengo en mi trabajo es global y holística, por lo tanto opino que cuando las personas llegan a mi no sólo tienen un desequilibrio sino que a consecuencia de los conflictos o la dificultad para adaptarse a los distintos retos que la vida propone, y el estrés que ello conlleva, suelen estar alterados más de un aspecto de la persona: emocional, energético, físico, bioquímico, etc.

Por ello utilizo los testajes tanto del Pulso (V.A.S) como el Muscular (Kinesiología) para determinar cuál es la verdadera raíz del problema y qué es lo más prioritario a corregir. De este modo, se irán equilibrando los distintos desórdenes según el subconsciente de la propia persona me vaya indicando que es mejor para ella, y utilizando las herramientas que asimismo por testaje me indique que más le ayudan a resolver.

¿En qué consiste una sesión?

Comenzamos la sesión haciendo una pequeña entrevista para rellenar la ficha, si es una primera sesión, obteniendo los datos más relevantes de la persona y cual es su problemática. En las sesiones sucesivas simplemente haremos balance de como ha ido desde la sesión anterior y que nos queda por resolver.

Después ya pasamos a la camilla donde la persona se tumbará sin necesidad de quitar la ropa. Y comenzaremos el testaje con el pulso o con los músculos y de este modo obtenemos la información de qué le está pasando a la persona, cuáles son los planos que están afectados (físico, químico, emocional, mental, energético, astral, etc.) y cuál es el origen que ha generado sus problemas. Cualquier información que aparece se equilibra en el momento con las diferentes herramientas que utilizamos: Síntesis Energética, Kinesiología, Descodificación Biológica, Biomagnetismo, Esencias Florales, etc. según convenga.


¿Cómo se sabe que tipo de técnica será más conveniente?

En las consultas utilizo muchas técnicas distintas y será el test el que determine cuál funciona mejor a cada persona y en cada momento concreto.

Al hacer el test nos comunicamos con el subconsciente (esa parte de nosotros que lleva el control de todas las funciones automáticas del cuerpo y también donde se guardan los recuerdos de todas las experiencias vividas) Por lo tanto, esa parte de nosotros sabe perfectamente cual es el problema, que partes del cuerpo están afectadas por ello y que se necesita para resolverlo.


¿Cuánto dura una sesión?

La sesión dura aproximadamente una hora y media. Siempre, tanto la primera sesión como las sucesivas tienen la misma duración.


¿Cuántas sesiones se necesitan?

Depende de diversos factores: primero del problema en sí mismo, no es igual algo reciente y puntual que algo muy antiguo y crónico.

La disponibilidad que tenga la persona para hacer cambios en su vida (ya sea hacer una dieta o soltar una relación tóxica, por ejemplo). El ritmo de cada persona, algunos son más rápidos y otros más lentos, y todos los ritmos son correctos. Esta terapia es muy respetuosa y nunca se va a forzar nada para lo que la persona no esté preparada o no pueda asumir. Por ejemplo, si debajo de todos los síntomas lo que apareciera es un tema de abusos en la infancia, nunca se abordará hasta que la propia persona tenga recursos para recibir esa información, asumirlo y gestionarlo, es decir, no saldría en el testaje trabajarlo como prioritario, si no que pediría otras cosas antes para que la persona vaya reuniendo herramientas y fuerzas antes de poder entrar ahí.


¿Con qué frecuencia se hacen las sesiones?

Dependiendo del estado de la persona y de la capacidad que tiene cada uno para asimilar el trabajo realizado pedirá las visitas más o menos frecuentes. En general, al ser tratamientos muy profundos y de cambio de conciencia grandes, suele ser la frecuencia de una sesión al mes. Aunque también hay algún caso en el que se recomiende empezar cada dos semanas, al principio y según la persona va mejorando se distancian las sesiones. En otros casos, a las dos o tres sesiones la persona ha resuelto su tema por el que vino y ya no necesita más. Y en estos casos es frecuente que las personas sólo vuelvan a acudir a la consulta por cosas puntuales.


¿Se puede hacer un tratamiento después de haber comido?

Sin ningún problema, no afecta en absoluto.


¿Cuáles son los efectos secundarios después de una sesión?

Cada persona lo vive de una manera distinta y tiene su propia experiencia. Hay personas que terminan llenas de energía y otras necesitan descansar para asentar y procesar toda la información. A veces en los días posteriores puede haber efectos de limpieza ya sea física (pequeño resfriado, diarrea…) como emocional, y tal vez afloren sentimientos que se han estado reprimiendo por mucho tiempo y se necesite llorar o empezar a gritar lo que se ha callado durante años… Esto son solo algunos ejemplos que podrían suceder pero la mayoría de las personas lo viven bien y felices por los cambios que observan desde el primer momento, pues sienten ligereza y haberse quitado un peso de encima.


¿Cómo es una sesión a distancia?

La sesión a distancia tiene exactamente el mismo efecto que una sesión presencial pero tiene un protocolo ligeramente distinto. Los pasos a seguir son los siguientes:

Primero concertamos la cita para el día en que se hará la sesión. Y acto seguido enviamos por mail un cuestionario que la persona nos tendrá que responder, con sus datos personales y qué quiere tratar. En este correo se envía también el número de cuenta en el que se hará el pago de la sesión por anticipado, ya sea por transferencia, ingreso o Paypal. La persona nos devolverá el correo con el cuestionario, una foto reciente y el resguardo del pago.

Cuando llegue el momento de la sesión, avisamos de que vamos a comenzar y pedimos que la persona esté preferiblemente tranquila, aunque no es necesario que permanezca en la cama, puede estar en casa haciendo cosas o incluso trabajando siempre que el trabajo no requiera conducir maquinaria pesada o cualquier vehículo, es decir, puede estar activa pero no en actividades que conlleven un riesgo si a la persona le entrara sueño, pues a veces en personas más sensibles se nota el movimiento energético de lo que se está realizando.

Durante la sesión nos conectamos con la energía de la persona a través del pulso, de su fotografía y de sus datos personales, haciendo una lectura de cómo está su energía y cuáles son los bloqueos o temas que necesita equilibrar. No tenemos contacto visual en ningún momento, ni siquiera vía internet por Skype o herramientas parecidas porque no es necesario, lo cual da mucha más libertad a ambos (terapeuta y cliente) a la hora de elegir los horarios de las citas. Aunque si se mantendrá un contacto por Whatsapp o teléfono durante toda la sesión por si surgiera alguna duda o se necesitara pedir la colaboración en algún ejercicio de visualización u otras formas para apoyar el trabajo, por lo tanto es necesario tener el móvil operativo.

Cualquier desorden o desequilibrio que vamos viendo durante la sesión se corrige en ese mismo momento a nivel energético, y los efectos se irán manifestando en el plano físico (ya sea el propio cuerpo de la persona o en su propia vida) bien inmediatamente o a medida que las energías que se han movido durante la sesión se vayan armonizando.

Al finalizar se envía un documento con un completo informe explicando toda la información detallada de lo que salió en la sesión, todo lo que se trabajó y equilibró, si hay alguna recomendación a seguir y si fuera necesario hacer una próxima revisión.